Un ataque chato. A pesar de que la Selección Mexicana realizó un total de seis remates a portería ante Honduras, únicamente uno de esos disparos fue producto de sus delanteros.
Jaime Lozano arrancó este compromiso con Hirving Lozano, Santiago Giménez y Orbelín Pineda para encabezar el ataque del Tricolor, sin embargo, ninguno de los tres logró hacer un disparo a portería.
El 'Chucky' logró impactar la esférica en dos ocasiones pero una se fue desviada y otra fue bloqueada. Por su parte, Pineda únicamente consiguió un remate el cual fue tapado por los rivales, mientras que el Bebote fue el atacante que más quedó a deber, ya que en sus 57 minutos de juego no realizó un solo tiro.
Con el transcurso de los minutos, el director técnico azteca decidió modificar este tridente con el ingreso de Uriel Antuna, Raúl Jiménez y Julián Quiñones, lo que provocó que México consiguiera su primer y único tiro a puerta de uno de sus delanteros.
Antuna ingresó al terreno de juego al medio tiempo, pero no logró conseguir tener ese impacto que incomodara al guardameta hondureño. Otro jugador que se fue en blanco en los remates fue Quiñones, ya que en sus 18 minutos de juego no pudo conseguirlo, por lo que Raúl fue el encargado de conseguir este tiro después de haber ingresado al minuto 58'.