Los pocos mexicanos que han llegado a Pumas con la actual directiva, han sido intentos fallidos; sin embargo, Juan Pablo Vigón es el indicado para romper con 'la maldición azteca' de la Era de Rodrigo Ares de Parga, y convertirse en un mexicano no canterano, que sí rinda.
Y es que desde el Torneo Apertura 2016 que el actual presidente universitario tomó posesión de su cargo, han llegado 25 refuerzos, pero sólo ocho son mexicanos (incluyendo a los recién llegados): Juan Pablo Vigón, Martín Barragán, Santiago Palacios (único canterano, pero jugaba en la Segunda División de Holanda), Rodrigo González, Néstor Calderón, Erick Torres, Miguel Fraga, Rosario Cota; sin embargo, a ninguno le ha ido bien en el Pedregal, y además tampoco llegaron a Pumas luego de tener una temporada sobresaliente en su equipo anterior, pese a que todos tenían actividades en sus antiguos clubes.
Es justo ahí donde entra Vigón, quien llega a Pumas después de ser un referente del Atlas y ahora tendrá la tarea de demostrar que Universidad no se equivocó al contratarlo.
El jugador tapatió era el capitán rojinegro y uno de los responsables de que los Zorros tuvieran un buen arranque en el Clausura 2019, incluso jugó 15 partidos y en todos fue parte de la oncena titular, además de que anotó dos goles, situación que le originó su primera convocatoria a la Selección Mexicana, pues el Tata Martino lo llamó para los partidos amistosos ante Chile y Paraguay.
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Otro de los mexicanos que llegó con un poco de brillo a Pumas fue Néstor Calderón, pues el 'Avión' llegó a Universidad después de haber sido Campeón con Chivas (en el Clau. 17) e incluso, a pesar de haber sido suplente parte del torneo regular jugó toda la Liguilla; sin embargo, con Pumas, en un año, no le fue bien.
