En busca de resolver el conflicto legal en el que se encuentra involucrado, Pumas se reunirá la próxima semana con los abogados del representante paraguayo José María González Araujo para así llegar a un acuerdo sobre cómo pagará los dos millones de pesos que se le exigen, cantidad que el club universitario está dispuesto a liquidar.
El sudamericano interpuso una demanda a los auriazules por dicha cantidad, esto tras no cumplir lo establecido con un pago de 3.2 millones de pesos en 2011, cuando Araujo expidió facturas a nombre del Club Universidad Nacional, monto que no se niega a pagar la escuadra de la Liga MX.
Cabe recordar que los abogados del representante guaraní mencionaron a la revista Proceso que en caso de que su cliente no reciba la cantidad de dinero solicitado podría comenzar un embargo en contra de la institución.
En caso de llegar hasta esa instancia, el deudor decide qué bienes son los que le pueden embargar; aunque Pumas hará todas las negociaciones necesarias para no llegar a esta instancia porque reconocen el adeudo.