Walter Montoya ve como un premio llegar a Cruz Azul

Montoya posa en una fotografía
Montoya posa en una fotografía
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RÉCORD
DÉBORA D’AMATO
| 27 Dic, 2017

Walter Montoya carga las pilas en su ciudad natal, Machagai, ubicada en la provincia de Chaco, en Argentina. Aprovecha cada minuto que pasa, porque este día se sube a un avión. Lo espera un nuevo desafío en México: Cruz Azul.

“Estoy realmente emocionado por haber culminado este año de esta manera. Siempre soy un tipo optimista porque de todo saco lo positivo. Después de un año de poca actividad, la posibilidad de sumarme a Cruz Azul es un premio a los que pocos pueden acceder y que no imaginé. Me siento un privilegiado porque un club tan grande apueste por mí”, le aseguró el chaqueño a RÉCORD, en exclusiva.

¿Por qué sí a Cruz Azul y no a otras propuestas?

Porque fue persistente. No es la primera vez que me quisieron llevar. Ésta es la segunda. Inter de Porto Alegre también fue una buena propuesta, pero Cruz azul es un club muy grande. No fue una negociación tan extensa, me interesó en cuanto mi representante me la contó.

Deseo de todo corazón poder retribuir a esta confianza con rendimiento y resultados. Además, hablé con varios amigos, Julián Velázquez y Chelito Delgado. Ellos me hablaron de un modo que también ayudaron a que me terminara de convencer. El futbol mexicano además está en un gran momento y me gusta, es rápido, ordenado. Fue un combo el que me convenció.

Montoya, durante su presentación con el Sevilla

Montoya, durante su presentación con el Sevilla|FACEBOOK SEVILLA FC

¿Eres consciente del momento en el que llegas?

Sí, porque como decía, Julián (Velázquez) y el Chelito (Delgado) me pusieron en onda con las cosas que yo no sabía. Por ejemplo, la urgencia de conseguir un título. Esa presión es linda siempre para uno.

O sea que sabes de la necesidad de ganar un campeonato y, por ende, de la presión extra, de esa que acelera todo...

Los clubes grandes siempre tienen la presión de obtener un título, pero cuando se le niega por mucho tiempo la presión muta a necesidad. En mi caso llego a un club que necesita ganar una copa y yo necesito demostrar que estoy para ganarla. Quiero la copa por el club, pero también la quiero por mí.

¿Cómo es eso?

Yo llegué al Sevilla de la mano de un técnico y a los pocos meses ese técnico se fue y, con él, mis posibilidades de jugar, porque el que vino no pensaba lo mismo que (Jorge) Sampaoli y casi no jugué más. Yo soy un jugador de futbol que nunca se olvida de jugar, así por un tiempo no haya tenido continuidad. Cruz Azul confió en mí pese a mi ausencia de futbol. Es cierto que ya me habían querido una vez y seguramente por lo que rendí en Rosario Central.

Yo tengo la obligación de demostrarle a este técnico (Pedro Caixinha) y a quienes me contrataron que soy ese jugador por el que se decidieron. Yo tengo que demostrarle que soy ese que tanto le gustó en Rosario Central.

Montoya posa en el Sánchez-Pizjuán

Montoya posa en el Sánchez-Pizjuán|FACEBOOK SEVILLA FC

¿Y el hecho de llegar a un equipo que tiene amigos, ayuda?

Eso sirve para la adaptación, el día a día. Pero no es clave. Con afectos y gente con la que te llevas bien siempre es más sencillo. No es imprescindible, pero ayuda.

¿Se promete algo a la afición?

Las promesas no sé si están tan buenas porque obtener un título depende de muchos factores. Lo que sí puedo prometer es que haré todo lo posible por lograr ese objetivo desde la responsabilidad, el sacrificio y el respeto. Yo creo que una cosa lleva a la otra y eso sí puedo prometerlo. Quiero el título tanto como la afición, eso lo garantizo.

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