Rodolfo Pizarro tuvo un gran cierre de año, luego de superar una fractura del peroné derecho que sufrió durante los Juegos Olímpicos, para convertirse en el jugador más deseado del pasado Draft de la Liga MX.
El jugador demostró sus cualidades dentro de la cancha y varios equipos mostraron interés en su trabajo; sin embargo, fue Chivas el que contrató sus servicios para el Clausura 2017.
El joven talento se dijo orgulloso por formar parte de uno de los equipos más grandes de México. Tiene toda la disposición para seguir trabajando duro, y sobre todo, buscará ser campeón de Liga una vez más.
“El 2016 fue mi mejor año en lo futbolístico, a pesar de la lesión que me dejó tres meses fuera.
“Disfruté mucho el año, pude ser Campeón (con Pachuca) y creo que elevé mi nivel; para el 2017 espero cumplir mis metas, tratar de ir a Selección y ser campeón con Chivas”, explicó.
Pizarro debutó en el Apertura 2012 y tras varias campañas destacando con los Tuzos, levantó su primer título en el Clausura 2016 venciendo en la Final al Monterrey. Las miradas ya estaban puestas en él. Además, el técnico del Tri, Juan Carlos Osorio, lo convocó al representativo nacional.
Ante Senegal marcó su primer gol como seleccionado mayor y jugó además ante Canadá dentro de las eliminatorias rumbo a Rusia 2018.
Se esperaba que fuera uno de los que más brillara por México en los Olímpicos; no obstante, una fractura ante Fiji durante el primer compromiso lo dejó fuera de la justa.
Pizarro regresó para la Jornada 15 y recuperó la titularidad en la escuadra que dirige Diego Alonso, lo que demostró su fortaleza mental.
“Es un compromiso que tenemos todos los jóvenes, de seguir por la misma línea, demostrar partido tras partido que no están equivocados. “Me siento con la capacidad, me siento mucho mejor que antes, más
maduro y comprometido, sé que falta mucho y debo trabajar”, indicó.
Con 133 partidos en Primera División y ocho goles anotados, Pizarro encara una nueva etapa, que puede catapultarlo a lo más alto del futbol mexicano.
