Chivas exorcisó sus demonios y al mismo ‘Diablo’. El Guadalajara hilvanó su tercer triunfo del torneo con dedicatoria al cielo y en medio de un ‘infierno’ por la polémica, sumando su segundo triunfo en fila en casa, situación que no sucedía desde el 8 de abril del 2017.
Durante los primeros minutos del partido, el Rebaño demostró que su poderoso arranque de 2019 no es una ilusión y dominó a los escarlatas durante varios lapsos.
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Sin embargo, el marcador se abrió hasta el segundo tiempo a través de un disparo de media distancia de Alan Pulido para vencer a Alfredo Talavera.
La emoción provocó que el tamaulipeco corriera a dedicarle la anotación a su compañero Raúl Gudiño, que en días recientes perdió a su bebé, provocando el abrazo grupal del Rebaño.
Los Diablos no bajaron los brazos y se volcaron al ataque en busca del empate, poniendo en aprietos a los tapatíos en varias ocasiones.
La polémica surgió cuando Triverio remató de cabeza dentro del área y la pelota se paseó dramáticamente en la línea de gol, por lo que Gudiño tomó las pelota en ese instante.
Y aunque el Jorge Antonio Pérez Durán marcó gol en favor de los escarlatas, recurrió al VAR para confirmar su decisión, misma que fue revocada en medio de la polémica que provocó que se calentaran los ánimos en el terreno de juego, anulando la anotación visitante y devolviéndole el ‘alma al cuerpo’ al Rebaño.
Debido a esto el encuentro se detuvo varios minutos, por lo que se agregaron nueve minutos más de tensión total en el inmueble rojiblanco, lapso que fue eterno para los tapatíos y un suspiro para los Diablos, que no lograron el empate.
