Morelia es una ciudad que ya cimbra con la visita del Papa Francisco y aunque aún faltan dos semanas para su llegada a suelo purépecha, en las calles y avenidas se pueden apreciar numerosas muestras de bienvenida en espectaculares, paradas de autobús, bardas e incluso servicios del transporte público.
El Estadio Morelos se alista también para el recibimiento; Monarcas disputará frente a Chivas su último encuentro en el lapso de un mes y será hasta el 27 de febrero próximo que vuelva a utilizar su cancha debido a las medidas de seguridad que ya se implementan por la convivencia que tendrá el Sumo Pontífice con jóvenes en este escenario futbolístico.
En el centro de la capital michoacana los comerciantes tienen a la venta playeras, botones, rosarios y demás artículos con la imagen del máximo jerarca católico, incluso billetes de lotería. En la Catedral, donde Jorge Mario Bergolio ofrecerá una misa, ya existe la expectación.
Los alrededores del estadio no son la excepción y en los puestos donde comúnmente se ofrecen en un día de partido como ayer casacas de Chivas, Morelia, América, entre otros equipos, aparecen por esta ocasión bufandas del Papa Francisco que tienen un costo de 100 pesos.
En la ciudad existe más presencia de elementos federales y estatales y cada vehículo que entra y sale de Morelia es fotografiado y muchos revisados para un control estricto. La visita está muy cerca y la ilusión es grande en la mayoría.
"Ya queremos que venga el Papa, será algo muy bonito y esperemos que haya una hermandad en la ciudad, sin problemas", manifestó una seguidora del cuadro purépecha previo al duelo contra el Rebaño.
