Las visorías de porteros en América han sido todo un éxito y tras la convocatoria que lanzó el club en búsqueda de uno ‘nuevo’ Guillermo Ochoa, cerca de 400 juveniles nacidos entre los años 2002-2007 se probaron con el anhelo de tener una oportunidad en uno de los equipos grandes de México.
Gabriel Farfán, coordinador general de arqueros en las Águilas, recibió esta encomienda por parte de la directiva y actualmente son 20 los guardametas que ‘sobreviven’ después de las arduas pruebas que se han realizado durante este mes en el Nido de Coapa.
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En ellas, se han calificado desde los aspectos técnicos, de golpeo y tácticos hasta los psicológicos comprendiendo que todo debe ser y funcionar como una preparación integral. Ahí se evalúa la toma de decisiones, personalidad, liderazgo, tolerancia a la frustración y entendimiento del éxito, entre otras situaciones imprescindibles de la posición.
Los jugadores que han llegado a esta etapa fueron citados después de las vacaciones de esta Semana Santa para entrenar con las categorías juveniles azulcremas y demostrar que son capaces de superar los siguientes obstáculos durante el proceso hasta lograr una posible contratación para cumplir así su sueño.
