Dentro de una de las zonas más conflictivas de la Ciudad de México, en la Colonia Daniel Garza de la alcandía Miguel Hidalgo, donde hace unos meses agarraron a una banda llamada ‘Los Diablitos’, que se dedicaba a asaltar a automovilistas, existe un oasis para enderezar el camino de la juventud. Se trata del deportivo Constituyentes donde se desarrolla la Liga 'El Faro'.
"Por el futbol hemos sacado a chavos del activo, de la marihuana porque vienen y dicen 'dame chance de jugar'. Les digo 'no te quiero ver ni con monas, ni nada, yo te veo con una y no te dejo jugar'", dijo a RÉCORD el administrador de la Liga, Juan Carlos Mendoza.
El directivo, quien lleva 14 años al frente de 'El Faro', mencionó que, al principio, recibió todo tipo de amenazas de parte de los jugadores, quienes bajan de las colonias, América, Belén de las Flores, 16 de septiembre y Observatorio.
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“De inicio fue muy difícil porque toda la gente venía, amenazaba: 'te voy a meter un balazo'. Poco a poco fui, con miedo y ganas, cambiando la mentalidad de los jugadores. La zona es demasiado fuerte, hay demasiados problemas. A cada rato eran broncas. Estuve a punto de dejarlo", compartió.
Juan Carlos Mendoza ha logrado aportar su 'granito de arena' con el papel que tiene en la Liga para ayudar a disminuir la violencia y adicciones entre los jóvenes; sin embargo, está consciente de que el problema es mayor, pues no puede meterse en la educación a fondo, de todos sus jugadores.
"Yo no me inmiscuyo a que se dedican. Es algo ajeno a mí, lo que siempre les digo: 'aquí adentro del deportivo, respétense' y todos lo han hecho”, sentenció.
