El entrenador del Barcelona, Luis Enrique Martínez, se mostró satisfecho del partido que hizo su equipo ante el BATE Borisov, al que derrotó a domicilio (0-2) y dominó a placer durante todo el partido.
"Hoy no sufrimos nada, gracias al rigor en la presión y a que estuvimos siempre bien colocados en las segundas jugadas. Ahí hay que darle el mérito al trabajo de los centrocampistas", destacó en la rueda de prensa posterior al encuentro.
El empate entre Bayer Leverkusen y el Roma (4-4) consolida además a los azulgranas en el liderato del Grupo E, por lo que Luis Enrique indicó que la jornada "fue positiva en cuanto a resultados" y también "en lo que necesitaba el equipo", en su visita al Borisov Arena. "Mantener la portería a cero siempre viene bien", añadió.
Sin embargo, el técnico asturiano lamentó que sus hombres todavía no estén del todo finos de cara a puerta, algo que se viene repitiendo en muchos partidos en este primer tercio de la temporada: "Seguimos necesitando muchas ocasiones de gol para materializarlas".
Pese a que Neymar da Silva volvió a disfrazarse de Messi para echarse de nuevo el equipo a la espalda -asistió a Rakitic en los dos goles-, Luis Enrique evitó caer en personalismos y felicitar a todo el colectivo, "porque todos aportaron".