El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, desmintió haber mantenido contacto con una empresa que figura en la filtración de documentos del bufete Mossack Fonseca en Panamá durante su etapa como dirigente de la UEFA y aseguró que no aceptará que se "ponga en duda su integridad".
La reacción de Infantino es consecuencia de las informaciones publicadas por medios ingleses que señalan que el suizo, cuando era directivo de la UEFA, habría firmado en 2006 un contrato por los derechos de televisión de la Liga de Campeones con dos personas vinculadas a empresas citadas en los documentos, acusadas a su vez de supuesto soborno en la investigación que el FBI lleva a cabo por casos de corrupción en la FIFA.
"Yo personalmente nunca traté con Cross Trading ni sus propietarios, ya que el proceso fue conducido por un equipo de marketing en nombre de la UEFA. Estoy consternado y no aceptaré que mi integridad sea puesta en duda por ciertos medios, especialmente dado que la UEFA ya ha facilitado en detalle todo lo relativo a estos contratos", afirmó Infantino en un comunicado de FIFA.
La firma fue con la empresa Cross Trading, con registro en el paraíso fiscal y filial de la llamada Full Play que es propiedad de Hugo Jinkins. El acuerdo habría cifrado en unos 98 mil euros la cantidad a pagar por los derechos de la Champions de 2006 a 2009 y la misma empresa habría revendido los derechos por una cantidad cercana a 274 mil euros a una cadena de Ecuador.
"He contactado inmediatamente con la UEFA para buscar claridad. Lo he hecho porque ya no estoy en UEFA y son ellos quienes exclusivamente procesan toda la información contractual relativa al caso. UEFA ya anunció que va a revisar sus numerosos contratos comerciales y respondió ampliamente sobre estos contratos específicos", añadió Infantino, presidente de FIFA.