Jesús Tomillero era un silbante de la Segunda División de España que tuvo que dejar de serlo porque, una vez que se declaró abiertamente homosexual, no dejaron de existir insultos hacia su persona.
El exsilbante es el primero del futbol español que asumía sus preferencias homosexuales y resultó ser una víctima más de los prejuicios en pleno siglo XXI, hecho que indigna al mismo Tomillero.
Fueron dos encuentros en los que el español fue humillado pero cuando en la segunda ocasión se metió con él todo el público tras señalar un penalti, no aguantó más y decidió retirarse como árbitro.