El futbol mexicano no solo exporta jugadores, sino también entrenadores y, más recientemente, directivos con proyectos ambiciosos que pretenden transformar el balompié en lugares inesperados. Uno de los ejemplos más recientes es Javier Salinas, exdirector comercial de la Federación Mexicana de Futbol, quien ha tomado las riendas del desarrollo futbolístico en Nicaragua, un país centroamericano con poca tradición deportiva.
Salinas, ahora director de selecciones nacionales de Nicaragua, ha asumido el reto de lograr lo impensable: clasificar a los "Pinoleros" a su primera Copa del Mundo. Su llegada a la Federación Nicaragüense de Fútbol (FENIFUT) en 2022 marcó el inicio de un proyecto que busca demostrar que con hambre de triunfo y un enfoque profesional, incluso los equipos con menos historia pueden aspirar a grandes logros.
A dos años de haber llegado a su cargo, Salinas puede presumir que el valor de la plantilla de Nicaragua incrementó en un 259.1%, pues paso de tener un valor de 1.9 MDE a uno de 4.925 MDE. En el último ranking FIFA ocupa el puesto 131.
Entre los cambios implementados bajo su liderazgo se encuentra la contratación de una nutrióloga de planta, la priorización del trabajo psicológico con los jugadores y la creación de un área de inteligencia deportiva.
Javier Salinas, quien ocupó el cargo de director de mercadotecnia de la Federación Mexicana entre 2010 y 2012, ahora busca demostrar que se puede trabajar de manera eficiente en Concacaf,