Dos goles de Cristiano Ronaldo, en el tramo final de cada tiempo, dieron la victoria al Real Madrid en Ipurúa, donde sobrevivió con eficacia al ímpetu de un meritorio Eibar.
La habilidad de Ronaldo para aparecer en los momentos decisivos ofrecieron al Real Madrid tres puntos con los que mantenerse enganchado en La Liga, sin dejarse ir, pese a la distancia que le separa de la cabeza y a la euforia que ha provocado su actuación en París.
Bale y Ronaldo tuvieron su doble ocasión en una jugada aislada de los de Zidane, pero ninguno de los dos fue capaz de aprovechar el balón largo de Marcelo, primero por la buena actuación de Dmitrovic, y después por la buena anticipación de Capa.
Eso sí, Cristiano puede perdonar una, pero no dos, y el portugués aprovechó de una forma sensacional un magnífico pase con el exterior de Modric, tras un error de Arbilla, para definir con maestría.
El segundo tiempo arrancó con un Real Madrid más tranquilo por el gol a favor, buscando calmar el encuentro ante un Eibar que no dejaba de presionar. Pero los locales no dejaron de creer, y Ramis encontró el empate en el minuto 50 cabeceando de forma espectacular un córner sacado por Pedro León.
Kike García tuvo su opción a la contra a falta de diez minutos para el final en un mano a mano con Navas, pero el mal control evitó una mejor opción para el ariete armero. Y es que, si algo le sobra al Madrid, es pegada y Cristiano cabeceó a la red el gol de la victoria madridista ante un Eibar que luchó y tuvo sus opciones, pero que sigue sin saber lo que es ganar al equipo de Zidane.