El buen partido del delantero Chiedozie Ogbene evitó la derrota de la República de Irlanda y frustró el triunfo de Bélgica (2-2) que con un equipo plagado de jugadores poco habituales desperdició en dos ocasiones su ventaja en el marcador.
Ogbene, un atacante que milita en el Rotherham, de la tercera división del futbol inglés, resultó decisivo en el choque. Marcó uno de los goles de su equipo, un golazo de chilena, y asistió en el segundo, que llegó a cuatro minutos del final paradar la igualada a la selección local.
Roberto Martínez, preparador belga, optó por una convocatoria llena de meritorios para los encuentros amistosos contra Irlanda y frente a Burkina Faso el próximo martes. Dejó fuera de la citación a pesos pesados como Thibaut Courtois, Eden Hazard, Kevin De Bruyne o Romelu Lukaku, futbolistas con más de 50 presencias en la selección.
Regresó el jugador de la Real Sociedad Adnan Januzaj que solo había estado presente una vez con su selección en los últimos tres años. Ausente en las últimas cinco citaciones de Roberto Martínez, Januzaj jugó el último cuarto de hora. Sustituyó a Charles De Ketelaere.
Apuntaba a triunfo claro de Bélgica. Dominadora de inicio y que tomó ventaja a los doce minutos con un gran tanto de Michy Batshuayi que ejecutó un disparo en parábola desde el vértice del área tras recibir un pase de Hans Vanaken.
Bélgica no aprovechó su dominio y el conjunto irlandés rentabilizó sus proximidades al área visitante. A diez del descanso llegó el golazo de la tarde. Un centro al área de Callum Robinson fue despejado por Youri Tielemans. Chiedozie Ogbene recogió la pelota de espaldas. Sin dejarla caer al suelo se la acomodó y después, de chilena, batió a Simon Mignolet.
El equilibrio se mantuvo aunque la posesión fue siempre del cuadro de Martínez que recuperó la ventaja en el marcador a la hora de juego. Un saque de esquina de Thorgan Hazard fue cabeceado a la red por Hans Vanaken.
Llegó el carrusel de cambios después. Januzaj fue uno de los que saltó al campo. El ritmo decayó y Bélgica pudo sentenciar el choque. No tuvo acierto.
Así, a cuatro minutos del final llegó el empate de la República de Irlanda. Un buen centro de Ogbene fue aprovechado por Alan Browne que, de cabeza, batió otra vez a Mignolet para frustrar el plan B de Bélgica.
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