Un doblete del serbio Dusan Tadic bastó al Ajax para imponer su superioridad ante el AEK Atenas (0-2) y para sellar su clasificación a los Octavos de Final de la Liga de Campeones tras trece años sin alcanzar esa ronda.
La travesía por el desierto de un club histórico de Europa como el Ajax duraba demasiado tiempo. Concretamente, desde el curso 2005/06, cuando se enfrentó al Inter en Octavos y fue eliminado tras empatar 2-2 en Amsterdam y perder 1-0 en Milán.
Desde entonces, fuera de Holanda casi todas sus actuaciones, salvo una Final de la Liga Europa que perdió con el Manchester United de José Mourinho, se habían saldado con muchas decepciones. Ese partido, en el que fue derrotado 2-0 en 2016, fue un síntoma de recuperación que ya se ha confirmado.
Con un par de bajas importantes, la del argentino Nicolás Tagliafico, que tenía que cumplir un partido de sanción, y la del marroquí Hakim Ziyech, uno de los hombres más desequilibrantes del Ajax, el conjunto holandés se jugaba la clasificación matemática para la siguiente ronda ante un rival necesitado.
El AEK Atenas, sin opciones de alcanzar la siguiente ronda de la Liga de Campeones, aún las tenía de lograr el premio de consolación llamado Liga Europa. Tenía que ganar para optar a ese torneo y decidió intentarlo con un sistema conservador, cediendo la pelota a su rival y esperando lograr un premio al contragolpe.
Con esa táctica provocó un duelo en el que el Ajax, durante el acto inicial, sobó la pelota sin encontrar huecos. El dominio del cuadro holandés durante los primeros 45 minutos fue absoluto. Sin embargo, apenas tuvo una clara ocasión en la cabeza del brasileño David Neres, que no aprovechó un centro de Frenkie de Jong y, solo delante de Vasilios Barkas, remató de manera inocente.
Pese al aplastante dominio de los hombres de Erik ten Hag, el AEK pudo marcharse al descanso por delante en el marcador con una ocasión del argentino Ezequiel Ponce, que en el último suspiro se encontró con el portero camerunés André Onana tras rematar un centro de Galo dentro del área pequeña.
La reanudación no trajo muchos cambios en el devenir del choque. El Ajax seguía a lo suyo, buscaba los tres puntos. El AEK esperaba sin oler la pelota y sin producir nada en ataque. Y, entonces, pasó lo que tenía que pasar en cinco minutos clave en los que se fabricó el primer gol del partido con protagonismo para Tadic.
Primero, rozó el gol en el minuto 63, con un remate al palo de Donny van de Beek tras una asistencia del jugador serbio, que después abrió la lata en el 68 gracias a un penalti tras una mano muy clara del croata Marko Livaja por la que fue expulsado tras ver su segunda cartulina amarilla.
Con el 0-1, el Ajax mantuvo su filosofía de ataque y no arriesgó cediendo terreno. Quiso sentenciar su clasificación para los octavos de final y lo consiguió gracias a Tadic, que definitivamente se quitó el corsé de la primera parte y aprovechó un servicio en bandeja de Klass-Jan Huntelaar para firmar un doblete definitivo con el que su equipo disfrutará por fin de los Octavos de Final.