El piloto mexicano Sergio Pérez manifestó su decepción tras obtener el quinto lugar en el Gran Premio de Australia, destacando la falta de ritmo de su RB20 durante la carrera, además de que su compañero, Max Verstappen, dejó la carrera muy temprano tras un incendio provocado por una falla en sus frenos.
Pérez, quien fue penalizado con tres posiciones en la parrilla de salida, no logró recuperarse a lo largo de la competencia. "Ha sido un fin de semana difícil en general", expresó Pérez para Viaplay.
"Hay mucho trabajo que tenemos que hacer, y también muchas cosas que tenemos que mirar. Fue un fin de semana en el que no teníamos ritmo y es muy decepcionante conseguir este resultado".
Durante la carrera, Checo Pérez experimentó problemas con el equilibrio de su monoplaza, lo que le llevó a perder una posición con George Russell desde el inicio, dificultando su recuperación a lo largo de la carrera. A pesar de los ajustes realizados en las dos paradas a pits, no logró recomponer su desempeño, enfrentándose a una alta degradación en los neumáticos en ambas ocasiones.
"El año pasado ya tuvimos problemas con esto en Las Vegas, así que tenemos que analizarlo", señaló Checo Pérez, anticipando posibles dificultades similares en la temporada.