El Ministerio del Interior croata y el sindicato de la policía advirtieron que ultras planean provocar desordenes en el partido entre Croacia y España, con el empleo de bengalas y petardos, el despliegue de símbolos prohibidos e incluso una agresión al arbitro.
En un comunicado que difundió en internet, autoridades confirman que disponen de informaciones acerca de los aficionados violentos que planean crear peleas, con el objetivo de que se suspenda el partido.
Según el informe, los desordenes se causarían con material pirotécnico, la entrada de fanáticos al terreno de juego o la exhibición de símbolos prohibidos, sobre los que no se hacen precisiones pero que pueden ser nazis o fascistas.
Por otro lado, el sindicato de la policía croata señaló, este martes, que los ultras planean atacar al árbitro del encuentro después de la media hora de partido.
"Los aficioandos violentos tratarán de atacar al árbitro principal después del minuto 30", aseguran las autoridades en una carta dirigida a la presidenta croata, Kolinda Grabar-Kitarovic, y el primer ministro, Tihomir Oreskovic, y que han publicado medios locales.
Según el sindicato, se trata de los mismos extremistas que provocaron los incidentes el viernes en Saint-Etienne, en el partido entre Croacia y República Checa, y que ocasionaron una multa a la federación de futbol de dicho país.