Lionel Messi volvió a brillar en una nueva victoria del Barcelona y fue su más grande admirador quien gritara uno de sus dos goles como si de una anotaciones de Final de Copa del Mundo se tratara.
Se trata de Mateo Messi, el mayor de los hijos del astro argentino, quien 'enloqueció' al ver desde casa como su padre clavaba en toda la escuadra un golazo de tiro libre. La adrenalina se apropió del pequeño de cinco años al grito de gol.
Messi se reencontró con el acierto a balón a parado con un potente lanzamiento pegado al palo que trataba de tapar Rui Silva en un libre directo muy cerca del área tras una falta del camerunés Yan Eteki a Pedri que tampoco vieron clara los rojiblancos.
Un tanto del francés Antoine Griezmann en el minuto 12 y dos del argentino Leo Messi en el 35 y el 42, el segundo de falta directa, permiten al Barcelona imponerse por 0-3 al Granada en el descanso del partido que mide este sábado a ambos equipos en el Estadio Nuevo Los Cármenes.
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