A pesar de que el gobierno iraní prohibió la entrada de las mujeres a los encuentros de futbol, Zahra Khoshnavaz, originaria de Therán, olvidó lo estipulado y decidió cumplir el sueño de asistir a un partido del Persepolis FC, pero lo tuvo que hacer vestida de hombre.
El sismo que sufrió su ciudad en noviembre de 2017, la inspiró a realizar sus deseos luego de cuestionarse: "¿Por qué morir en un terremoto y no realizar tus sueños? ¿Por qué no vas al estadio?" Así decidí ir".
"Lo único que me preocupaba era cómo comprar un billete: era muy difícil pedir un boletos, pero cuando pasé por el túnel y vi el terreno de juego, rompí a llorar", platicó Khoshnavaz en entrevista con Euronews.
La aficionada, quien utilizó ropa holgada y una barba falsa, ha sido parte de la tribuna en dos ocasiones y aunque sabe que es peligroso, no pierde la esperanza de que algún día las leyes discriminatorias terminen y las mujeres logren entrar al inmueble con toda la libertad.