Microsoft ha renunciado a su puesto de observador en la junta directiva de OpenAI que había atraído el escrutinio regulatorio en ambos lados del Atlántico, afirmando que no era necesario después de que la gobernanza de la empresa emergente de inteligencia artificial hubiera mejorado significativamente en los últimos ocho meses.
¿Qué es el escrutinio regulatorio?
El escrutinio regulatorio se refiere no sólo al alcance y la exigencia de la regulación sino también a las expectativas de los reguladores y la probabilidad de acciones de supervisión y cumplimiento.
Microsoft había asumido una posición de observador sin derecho a voto en el directorio de OpenAI en noviembre del año pasado después de que el CEO de OpenAI, Sam Altman, tomó nuevamente las riendas de la compañía, que opera el chatbot de inteligencia artificial generativa ChatGPT.
El puesto de Microsoft le permitía asistir a las reuniones de la junta directiva de OpenAI y acceder a información confidencial, pero no tenía derecho a voto en asuntos que incluían la elección de directores.
El puesto de observador y la inversión de más de 10 mil millones de dólares de Microsoft en OpenAI han provocado inquietud entre los organismos de control antimonopolio en varios países sobre la influencia y el poder que puede tener la inteligencia artificial, ahora de la mano de Microsoft.
¿Por qué Microsoft abandona su puesto?
Aún no hay una razón oficial pero se especula que ya que Microsoft no controla OpenAI, estarían buscando opiniones de terceros sobre las cláusulas de exclusividad del acuerdo.
Microsoft y OpenAI compiten cada vez más para vender tecnología de IA a clientes empresariales, con el objetivo de generar ingresos y demostrar su independencia a los reguladores para abordar las preocupaciones antimonopolio.