Will Smith renunció el viernes a la Academia de Las Artes y Ciencias Cinematográficas tras su bofetada a Chris Rock en la noche de los Oscar y dijo que aceptará cualquier sanción futura que le imponga la organización.
En un comunicado emitido el viernes a través de un vocero, Smith dijo que aceptará “cualquiera de las consecuencias futuras que la junta directiva considere apropiada. Mis acciones en la 94ª entrega de los Premios de la Academia fueron desconcertantes, dolorosas e inexcusables”, dijo Smith en el comunicado.
“Traicioné la confianza de la academia. Impedí que otros nominados y ganadores tuvieran la oportunidad de celebrar y ser celebrados por su extraordinario trabajo”, señala su comunicado. “Estoy desconsolado y quiero poner la atención en aquellos que merecen atención por sus logros y permitir a la academia volver al increíble trabajo que hace para apoyar la creatividad y la maestría en el arte cinematográfico”.
“El cambio requiere tiempo y estoy comprometido a trabajar para asegurar que yo nunca vuelva a permitir que la violencia sobrepase a la razón”, concluyó Smith en el comunicado.
La renuncia llega dos días después de que la junta directiva de la academia se reunió para iniciar los procedimientos disciplinarios contra Smith por violaciones a los estándares de conducta de la organización.
El domingo Smith se levantó de su asiento en primera fila en el Teatro Dolby y subió al escenario para abofetear a Rock, quien había hecho un chiste sobre la apariencia de la esposa de Smith, Jada Pinkett Smith. Momentos después ganó el premio a mejor actor por su papel en “King Richard”(“ Rey Richard: Una familia ganadora”).
Rock, quien iba a presentar el premio a mejor documental, rechazó interponer cargos cuando se lo ofreció la policía. Ha hablado sólo brevemente sobre el ataque en público diciendo en una presentación de comedia en Boston esta semana que todavía estaba “procesando” lo ocurrido.
Smith impactó al público en el teatro y los telespectadores cuando subió al escenario después de que Rock dijo en broma: “Jada, te amo. ‘G.I. Jane 2’ me muero de ganas de verla”.
Pinkett Smith, quien padece pérdida de cabello por una enfermedad llamada alopecia, se había rapado la cabeza en un estilo similar al de Demi Moore en la película militar “G.I. Jane” (“Hasta el límite”) de 1997.
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