Mientras las infecciones de coronavirus aumentan en algunas partes del mundo, los expertos vigilan una posible nueva ola de covid-19 en Estados Unidos y se preguntan cuánto tiempo pasará para detectarlo.
A pesar de que en los últimos dos años ha mejorado el monitoreo, los expertos señalaron que algunos desarrollos recientes no auguran nada bueno:
- Aunque más personas se están haciendo la prueba rápida de covid-19 en casa, menos personas se hacen las pruebas de referencia de las que depende el gobierno para contabilizar los casos.
- Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades pronto usarán menos laboratorios para detectar nuevas variantes.
- Funcionarios de salud se enfocan cada vez más en las admisiones a hospitales, que aumentan sólo después de que llegó la ola.
- Un programa de vigilancia de aguas residuales sigue siendo un mosaico con el que aún no se puede contar para obtener los datos necesarios para comprender las próximas olas.
- Funcionarios de la Casa Blanca afirman que al gobierno se le agotan los fondos para vacunas, tratamientos y pruebas.
“No estamos en una situación ideal”, dijo Jennifer Nuzzo, una investigadora de pandemias de la Universidad de Brown.
Los científicos reconocieron que la amplia disponibilidad de vacunas y tratamientos coloca al país en una mejor situación que cuando inició la pandemia, y que el monitoreo ha avanzado bastante.