Como parte de las medidas que se están tomando para evitar saturar el sistema de salud mexicano debido a la pandemia del coronavirus, la Asociación de Hospitales Privados y el gobierno nacional llegaron a un acuerdo para atender a derechohabientes de instituciones públicas.
Esta mañana se anunció formalmente que desde el próximo 23 de abril y hasta el 23 de mayo del 2020 los nosocomios privados prestarán e 50 por ciento de sus camas para atender a beneficiarios del IMSS, ISSTE, INSABI, Pemex, SEDENA y la Marina y hasta gente sin seguridad social.
“Los derechohabientes no tendrán que pagar ni estudios ni tratamientos, lo harán las instituciones”, explicó Marcelo Ebrard, secretario de relaciones exteriores de nuestro país. Sin emargo, los pacientes sí deberán acudir primero a su clínica pública correspondiente para de ahí ser canalizados o por lo menos ponerse en contacto por vía telefónica.
Entre los casos de derechohabientes que se atenderán en hospitales privados están las personas con temas del apéndice, úlceras gástricas y complicaciones en hernias. Además, las mujeres embarazadas también son parte de este grupo, a menos que su embarazo se esté atendiendo en clínicas públicas especializadas, en cuyo caso permanecerán en el hospital gubernamental.
“Quiero agradecer a nombre del gobierno d México a los dueños de los hospitales privados por esta decisión que han tomado, se trata de destinar la mitad de su capacidad para atender enfermos del IMSS, ISSSTE, y sin seguridad social, a todo el que lo necesite.
“Una mujer que va a dar a luz, la pueden atender a un hospital privado, eso nos permitirá liberar espacios en hospitales públicos para estar preparados y cuando se nos presente el momento más crítico tengamos todas las camas, equipos que se necesiten para salvar vida”, dijo Andrés Manuel López Obrador en conferencia de prensa.
Entre los nosocomios que brindarán este servicio se encuentran los hospitales ABC, Ángeles, Grupo Dalinde y Médica Sur, entre otros.
