Romper la barrera de género es una lucha constante que hacen muchas mujeres en el mundo. Allison Feaster, exjugadora de la WNBA, lo hace a través del baloncesto.
Durante su trayectoria deportiva enfrentó diferentes obstáculos; sin embargo, éstos no la frenaron para alcanzar sus sueños: jugó para la Asociación Nacional de Baloncesto Femenino de 1998 a 2008 para los Sparks de Los Ángeles, Sting de Charlotte y el Fever de Indiana.
“No me fijaba mucho en los obstáculos. Mi madre siempre me decía ‘haz lo mejor que puedes hacer’. Existen obstáculos, pero tienes que trabajar para romper estas barreras, intenté hacerlo y menos mal que me ha salido bastante bien”, aseguró Feaster en su visita a México.
“Mis padres y mis hermanos jugaban también, pero más allá de eso, es un deporte en el que trabajas valores que son útiles en casi todos los momentos de la vida. Vamos a trabajar siempre en equipo, siempre vamos a trabajar con otras personas, vamos a trabajar hacia un objetivo. Me alegro mucho de haber elegido el baloncesto”, recordó.
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En el marco del Día Internacional de la Mujer se celebra a partir de este viernes y hasta el 11 de marzo el Programa para Mujeres de las Academias NBA en el que participan los mejores 24 prospectos femeninos de 17 años y menores, del Caribe, México, Centroamérica y Sudamérica.
“Es muy importante hacer este tipo de eventos, muchas veces las mujeres no recibimos la misma atención que los chicos, es obvio, pero no pasa nada. Estamos aquí para cambiar eso mucho, estamos aquí para enseñarles a esas chicas que también nos merecemos un sitio en la mesa, que podemos participar y aportar mucho a la conversación”, mencionó la exWNBA.
“Hay un desequilibrio y estamos aquí para trabajar, para luchar, hay muchas mujeres detrás que han luchado en el pasado para que podamos tener un campo de oportunidades. Aquí hay 25, 26 chicas y una docena de entrenadores. Es muy importante que haya gente apoyando e intentando hacer cambios poco a poco”, enfatizó.
A través de la duela, la coach de la NBA Academy lucha para combatir la desigualdad de género. “Creo que se trata de tener a mucha gente en la mesa para escuchar y para reconocer que existe un desequilibrio, en primer lugar. Existe un desequilibrio y estamos aquí para tratar de llamar la atención y para intentar corregirlo”, declaró Feaster, quien fue seleccionada como jugadora de la All-Ivy League del primer equipo cada uno de sus cuatro años, y la primera atleta en cualquier deporte en ser reconocida como Jugadora del Año de la Ivy League tres veces.
