Necaxa sigue haciendo imbatible su casa. Los Rayos derrotaron 3-2 a Tijuana en un partido de volteretas y muchas emociones para seguir escalando peldaños en la tabla de posiciones. Con esta victoria el conjunto hidrocálido registró su tercera victoria en casa con gran actuación del argentino Maxi Salas.
Tras 8 jornadas disputadas en donde solamente ha caído dos veces, los Rayos confirmaron que la idea y estrategia de Guillermo Vázquez ya está impregnada en la plantilla.
Si bien por momentos el equipo tuvo desconcentraciones que ocasionaron que perder la ventaja que habían conseguido apenas al minuto 5 gracias al gol de Ventura Alvarado, el equipo supo regresar en el partido y meter el acelerador a fondo después de que Vladimir Loroña e Ignacio Rivero les dieran la vuelta en menos de media hora.
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Sin embargo, Necaxa regresó al partido en el inicio de la parte complementaria cuando Juan Delgado desbordó por toda la banda, hizo una diagonal hacía el centro para ponerse en posición de disparo y fusilar Gibran Lajud que nada pudo hacer con la raya que salió pero que injustamente pegó en el poste aunque para su mala fortuna el esférico le cayó a Salas que sin pensarlo le pegó para mandarla pegado al poste e igualar la pizarra.
Con 40 por delante, los Rayos se fueron hacía adelante para recuperar la ventaja que llegó en la recta final del partido luego de una jugada de Salas quitándose la marca de un par de rivales, filtrar el balón a la banda donde sin pensarlo Calderón metió el centro que impactó en la cabeza de Mauro Quiroga, quien no perdonó y mandar la pelota al poste más lejano de Lajud que solamente observó como fue vencido su arco una vez más.
