Bastaron 47 minutos en la cancha para que el cuestionado refuerzo del América, Federico Viñas, demostrara su calidad y se ganara el cariño de la exigente afición azulcrema. Y es que con solo 3 apariciones en la recta final de los partidos, el atacante uruguayo se convirtió en el delantero más efectivo de las Águilas al tener dos goles en su cuenta personal, inclusive algunos comienzan a llamarlo el nuevo talismán, sobrenombre que no desagrada al futbolista sudamericano.
“He escuchado que me llaman así (Talismán) y no está mal, me está gustando eso, de que me reconozcan y ha sido muy bonito. Lo que sigue es trabajar y tratar de continuar con este momento”, declaró el jugador azulcrema a su regreso a la Ciudad de México.
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Cabe recordar que cuando se anunció el fichaje de Viñas, la mayoría de los aficionados americanistas recriminaron a la directiva la decisión asegurando que la mejor opción era darle oportunidad a uno de los jugadores de la cantera.
Sin embargo, el propio atacante charrúa pidió a su llegada a nuestro país que le dieran la oportunidad de verlo dentro de la cancha y hoy con resultados ha podido ganarse no sólo la confianza de su afición sino también el mote de uno de los jugadores que en su momento fue muy querido en el Nido, Aarón ‘Gansito’ Padilla.
Lo cierto es que pesar de que su anotación no pudo valer los tres puntos, el jugador uruguayo no pudo ocultar su felicidad por volver a celebrar un gol con la camiseta de las Águilas.
“Estoy muy feliz por el gol, pero no se pudo ganar que era lo que queríamos. Lo que es importante es que el equipo nunca baja los brazos y lucha hasta el final. De seguir así, vendrán cosas muy buenas”, finalizó Federico Viñas.
