Santos golea 3-0 a una Máquina fuera de ritmo

LUIS SALAZAR

A Cruz Azul no le vino nada bien el receso de la liga: fue dominado, borrado, humillado y goleado  por un Santos que demostró que su futbol, ése que los llevó a dos finales seguidas, está de regreso.

El más alegre por la victoria fue el entrenador Guerrero, Diego Cocca, quien tomó un tanque de oxígeno. Así terminó con la racha de seis derrotas seguidas desde que empezó a dirigir al equipo.

El buen futbol de la Máquina no apareció en Torreón, al contrario, demostró graves deficiencias en la defensa, una apatía fatal y un desorden en todo el campo. En vez de aprovechar las dos semanas de receso parece que a los celestes les afectó el paro en la liga.

Apenas había empezado el partido, cuando en un tiro de esquina Rodrigo Ruiz centró, Felipe Baloy cabeceó y el balón le quedó a Darwin Quintero, quien en el área chica sólo lo desvió para meter el gol.

Y ahí empezó la demostración de futbol de Quintero, quien se llevó cuantas veces quiso a los rivales. Todos los ataques pasaban por sus pies hasta que fue expulsado en la segunda mitad por golpear a Christian Giménez.

Todavía Cruz Azul no se recuperaba del primer tanto, cuando Jorge Iván Estrada recibió un balón en el área y solo frente a Jesús Corona, anotó el segundo.

La Máquina quiso salvar el orgullo pero los guerreros se reagruparon atrás y jugaron al contragolpe con Quintero, quien provocó en la segunda mitad un penal.

Sin embargo, Darwin no lo cobró porque fue expulsado por el árbitro luego de agredir al ‘Chaco’. Quien tomó el balón y tiró el penal fue Juan Pablo Rodríguez para colocar el marcador 3-0.

Ahí el partido estaba terminado, aunque faltaban 20 minutos de juego, Cruz Azul estaba aniquilado, borrado, sin ideas.

El caso contrario es Santos, quien con el triunfo revivió y espera que todavía les alcance para pelear por un lugar en la Liguilla. Total, en el futbol mexicano, cualquier equipo puede calificar por más torneo irregular que haya tenido.