ROCÍO CEPEDA
Difícil resulta para algunas plazas del futbol mexicano convocar en sus estadios grandes masas de aficionados, pero ejemplo de lealtad y fidelidad se convierte la hinchada de Rayados en el Estadio Tecnológico, quienes a pesar del denso frío que azota al país en el presente invierno, demuestran que su más importante misión es apoyar al equipo regio.
No importando si se tiene que cargar con chamarra, guantes, bufanda, gorro o hasta el impermeable por su vuelve la lluvia helada, la tribuna del coso norteño no faltó a la cita contra Chivas de la Jornada 6, teniendo que soportar las inclemencias del tiempo para seguirle la huella al cuadro de Víctor Manuel Vucetich.
Frotarse de vez en cuando las manos para no llegarse a entumir, agitar los pies desde la butaca disimuladamente ayudó a que no se adormecieran, pero sin duda los cánticos, porras y gritos de apoyo para el Monterrey al menos mantuvieron cálidas las gargantas de quienes se sacrifican con devoción.
Y es que el rival puede ser motivo de buena convocatoria en un estadio, pero para Rayados nunca ha sido una razón, dado que su noble hinchada suele ignorar si llueve, truena o relampaguea el cielo regiomontano, para ésta y todas las ocasiones que juegue siempre habrá prenda para el cuerpo que logre mitigar lo que para otros es oposición.
