La Liguilla ya es cosa del pasado para Cruz Azul. Tras no darse los resultados requeridos para mantener vivas sus esperanzas de entrar a la Fiesta Grande, La Máquina no tiene otra opción más que cerrar su participación en el Clausura 2018 con una actuación convincente esta tarde ante Veracruz.
Así lo saben los Cementeros, que durante los últimos nueve torneos sólo han clasificado a dos Liguillas. “Nosotros no vamos a dejar de correr y trabajar. Obviamente aunque no esté la posibilidad de calificar, tenemos la mentalidad de ir a Veracruz a sacar un resultado positivo. El equipo tiene que ir a entregarse. Nosotros solamente debemos pensar en que tenemos que sacar ese partido”, aseguró el defensor celeste Gerardo Flores.
En los 16 encuentros disputados hasta ahora, Cruz Azul ha sido capaz de conquistar sólo cuatro victorias, dos de éstas en sus últimos tres enfrentamientos, mismas que para La Máquina llegaron demasiado tarde en el torneo.
“Sí (llegaron tarde los buenos resultados), pero el hubiera ya no existe, me parece que el equipo dejó de hacer varias cosas en algunos partidos. Nos cuesta ahora estar así. Lo rescatable es que se está mostrando una cara diferente. La idea del míster (Pedro Caixinha) se ha plasmado como él lo ha pedido, así que de aquí en adelante el equipo tiene que seguir con ese mismo buen juego que se está mostrando”.
Además, pese a enfrentar a un equipo que desde la jornada anterior consumó su permanencia en el Máximo Circuito, La Máquina espera a un equipo que entregará todo, hecho que los motivará a mantener un buen volumen de juego.
“Vamos a esperar a un equipo que va a entregarlo todo. La verdad, eso nos va a ayudar a no generar confianza. El equipo hizo un buen encuentro en el último juego que se tuvo en casa, así que estamos motivados y de aquí en adelante se tiene que mostrar ese volumen”, dijo.