Miguel Herrera salió muy molesto del Nou Camp tras perder ante León. El técnico del América evitó los cuestionamientos de los reporteros en la conferencia de prensa y sólo se limitó a decir que "jugamos un mal partido, buenas noches y disculpen".
Más tarde, y al salir a saludar a unos conocidos, algunos aficionados se le acercaron para gritarle "Piojo",e incluso, hubo uno que le pidió que "ya no meta" a Oribe Peralta.
Pero hubo un pequeño grupo que intentó prender la mecha al comenzar a gritarle "Martinoli", comentarista con quien tuvo aquel altercado en Filadelfia, situación por la que fue cesado de la Selección Nacional.
Al ser abordado por RÉCORD al subir al autobús de las Águilas sobre su negativa a contestar preguntas a los medios, el Piojo señaló que "estaba muy caliente para decir pend...".
Herrera se ha caracterizado por criticar a los árbitros cuando su equipo pierde, asegurando que perjudican a los de Coapa.
Esta vez, y tras haber recibido una petición de su directiva de no señalar más a los silbantes como responsables de sus descalabros, prefirió evitar hablar tras la derrota 2-0 ante La Fiera.