GIBRÁN ARAIGE
Las alarmas no dejan de sonar en la madriguera. Jornada tras jornada la institución rojinegra vive con tensión y sufrimiento, ya que no encuentran la forma de parar la crisis en la que están sumergidos. Tomás Boy era la esperanza hace nueve partidos, sin embargo hasta la fecha no ha podido conseguir ningún triunfo, aunque la directiva tapatía sigue confiando en el ';Jefe';, quien no tiene ningún tipo del ultimátum.
El timonel del Atlas se reunió ayer con parte de la cúpula mayor como lo hace normlamente a principio de semana. La realidad es que los directivos están preocupados por la situación, aunque el propio Boy aseguró que su chamba no está en juego, y él sigue firme con la idea de cumplir su contrato hasta junio del próximo año.
"Me reuní con la directiva como todas las semanas entre lunes y martes. Es una junta normal, entiendo todo lo que está sucediendo. La directiva está preocupada porque dé resultados y evidentemente serán los resultados al final del campeonato los que decidirán qué va a pasar, pero el compromiso mío es buscar los resultados. Hasta el momento no me han puesto ultimátum.
"Yo encantado de poder hacerlo (cumplir su contrato). No (nunca sentí estar fuera del equipo), evidentemente los resultados tienen preocupados a los directivos y a mí también y en algunos casos hemos sido víctima de la presión", comentó el técnico.
El estratega del conjunto tapatío está consciente de que la presión está al rojo vivo, y más porque conoce las entrañas del Atlas, y sabe que es un equipo en el cual se necesitan resultados inmediatos.
"El entorno en esta institución siempre es complicado, de ahí las dificultades para que muchos entrenadores quieran estar aquí, ese es el tema. En otros lados piden 2 años de paciencia, aquí (en Atlas) hay que dar resultados rápidamente”, sentenció Boy, quien agregó que él más que nadie se encuentra apenado por el mal momento que están pasando.
"Creo que la plantilla reune condiciones importantes para estar en mejores lugares, esto es lo que hace que mis resultados sean bastantes malos. Yo en lo personal estoy muy inconforme, nunca me había pasado esto en mi vida y lo lamento muchísimo, porque esta es una afición muy grande, pero los resultados de esta organización nunca han sido tan buenos desde hace muchos años, y yo estoy deseando cambiar eso lo más pronto posible".