La Audiencia Nacional confirmó el procesamiento del presidente del Barcelona, Josep Maria Bartomeu, por el fichaje por parte del club de Neymar da Silva desde el Santos de Brasil, por lo que será juzgado por un delito de corrupción entre particulares.
La sección cuarta de la Sala de lo Penal rechazó el recurso de la defensa de Bartomeu contra su proceso, al entender que sí hay indicios de que cometiera ese delito porque los acuerdos en 2011 entre el Barça y el astro brasileño para ficharlo alteraron "el libre mercado de fichajes de futbolistas, al impedir que el jugador entrara en el mercado conforme a las reglas de la libre competencia".
Bartomeu ostentaba en ese momento la Vicepresidencia del Barcelona y tenía "responsabilidades directivas en el ámbito deportivo" al mismo nivel que el entonces presidente, Sandro Rosell, dice el comunicado, "participando ambos" en los contratos fraudulentos de 2011 y sin informar de ellos ni al Santos ni al fondo DIS, que es el impulsor de la querella y resultó perjudicado por la operación por tener el 40 por ciento de los derechos federativos de Neymar.