Un gol del argentino Lucas Ocampos noqueó al Atlético de Madrid en el minuto 88, cuando subió al marcador el 2-1 para el Sevilla en el partido de la decimoctava jornada de LaLiga disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, tras el que el conjunto andaluz se afianza en la segunda plaza y hace salir a los madrileños de los puestos de la Champions League. Partido que el mexicano Héctor Herrera vio desde la banca.
Como se preveía, arrancó el partido intenso y con un primer susto que el argentino Ángel Correa le dio a los locales tras un fallo del central francés Jules Koundé y un remate desde muy lejos ante lo adelantado del meta marroquí Yassine Bono. Pero la respuesta no se hizo esperar y el croata Iván Rakitic, antes de que se cumpliera el minuto siete, se fabricó un zambombazo también desde muy lejos para ponérsela imposible al portero esloveno Jan Oblak, lo que propició que el Atlético no perdiera el tiempo para intentar tomar el mando del balón.
El Sevilla presionó entonces bien para evitar que el rival tomara posesión del centro del campo y que encontrara a Luis Suárez o el propio Correa, aunque los de Lopetegui se encontraron un problema en forma de lesión, pues el lateral derecho argentino Gonzalo Montiel se fue lesionado y se tuvo que recomponer la defensa con la entrada del serbio Nemanja Gudelj.
Tras esa circunstancia, los visitantes encontraron una de sus escasas vías de penetración, que acabó en un córner, y a su salida el central brasileño Felipe Augusto ganó bien la posición para rematar de cabeza el empate a uno rebasada la media hora de juego.
Después, y poco antes del descanso, el que se retiró lesionado fue Marcos Llorente, quien se quejó como Montiel de un problema muscular y fue sustituido por el argentino Rodrigo de Paul, mientras que en el inicio de la segunda Simeone hizo ingresar a Joao Félix, en el sitio de Correa, para buscar la presencia en ataque que le faltó a su equipo en la primera.
En este periodo se le vio mejor plantado a la formación visitante aunque el Sevilla, con juego directo, quiso también sorprender y así Rakitic tuvo una buena pero en esta ocasión se le fue fuera en un partido que, con esas connotaciones, se vio abierto y que en cualquier zarpazo se podía decantar para algún lado.
De esta manera se entró en la fase final del encuentro con el Atlético más poderoso tanto en la posesión como en acercamientos al área, con lo que parecía más lógico que los visitantes pudiera ganar la pelea, pero Ocampos, después de que el larguero rechazara un remate de cabeza del danés Thomas Delaney a la salida de un saque de esquina, dejó los tres puntos en el Sánchez Pizjuán.