Juventus sigue atrapada en la incertidumbre tras un empate dramático contra la Fiorentina en un duelo que reflejó tanto sus virtudes como sus carencias.
Un gol agónico de Riccardo Sottil en el minuto 87 salvó un punto para el conjunto viola, que aprovechó los errores defensivos de los bianconeri y volvió a encender las alarmas en el proyecto de Thiago Motta.
Hasta entonces, la Juventus había acariciado la victoria gracias a un doblete de Khephren Thuram, quien justificó con creces los 21 millones de euros que el club desembolsó por él el pasado verano. El joven centrocampista abrió el marcador en el minuto 18 tras una poderosa arrancada desde el mediocampo, culminada con un derechazo inapelable que superó a un David de Gea imbatible hasta entonces.
Sin embargo, la Fiorentina igualó antes del descanso. Un cabezazo preciso de Moise Kean, exjugador juventino, puso el 1-1 tras un centro medido de Adli. Kean, en un gesto de respeto, pidió disculpas a la grada mientras celebraba.
En la reanudación, Thuram volvió a ser protagonista. Tras recibir un pase de Koopmeiners, el francés controló con maestría, esquivó a dos defensores y definió con el interior para poner el 2-1. Parecía el tanto que sellaría la victoria, pero las sombras de la Juventus reaparecieron.
Cuando el cronómetro marcaba el minuto 87, una jugada caótica en el área pequeña terminó con un remate de Sottil que batió a Di Gregorio. Inconsolable, el portero vio cómo se desvanecían los tres puntos. Aún tuvo que intervenir De Gea con tres paradas decisivas en el tramo final para evitar una derrota que habría sido aún más dolorosa.
La Juventus suma así su duodécimo empate en 18 jornadas de la Serie A, un registro alarmante para un equipo que aspira a lo más alto.
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