Un ajedrecista, con el estilo que tanto añora el barcelonismo, es lo que presentó el Barcelona con Quique Setién. El corazón culé puede respirar un sentimiento conocido y agradable.
"Setién es un Cruyffista", aseguró Andrés Agulla, de ESPN; "es el que más se acerca a esa filosofía Cruyffista, que tanto éxito le ha dado al Barça", añadió Marc Crosas, analista de TUDN; "Setién es el Cruyffista más radical que queda ahora mismo", explicó Alex Pareja, analista de ESPN; "Setién es uno de los más radicales abanderados del Cruyffismo puro", agregó Barak Fever, de ESPN. Todos coinciden, la mejor apuesta que pudo hacer el Barcelona es el estratega español.
Setién es un obsesivo de la táctica. Sus equipos tienen un estilo claro. Parte de 4-3-3, pero sabe modificar al 3-4-3. La presión alta, recuperación inmediata en cancha rival, amplitud en bandas, circulación de pelota alta, mantener posesión de balón, hacer un equipo corto y no tan largo, que divierta a la grada, serán las claves del nuevo equipo culé. Setién, fiel seguidor y admirador de Johan Cruyff, ha intentado en sus escuadras mostrar ese equipo alegre, que tanto busca el aficionado culé.
"Barcelona va a ser un equipo más divertido, más ofensivo, asumiendo muchos más riesgos", cree Agulla sobre el inicio de esta nueva etapa.
Sin ser un hombre de casa, el estratega de 61 años, aficionado al ajedrez desde niño, se encargará de regresarle al cuadro culé esa mística, ese estilo táctico que tan buenos resultados le ha traído al Barcelona a lo largo de la historia.
"Las Champions las han ganado siempre con esa filosofía partiendo de Cruyff, con (Frank) Rijkaard, Pep (Guardiola) y Luis Enrique", recuerda Crosas.
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