El pasado viernes arrancaron las fechas de Bad Bunny en nuestro país, en el Estadio Azteca, en las semanas previas la empresa encargada de vender los boletos (TIcketmaster) confirmó que liberaría boletos, algo que salió perjudicial para el show, para la gente y para la organización.
De acuerdo a reportes de los asistentes en redes sociales, varias personas que tenían su boleto comprado tuvieron que regresar a sus casas o escuchar el show desde afuera tras enterarse de que sus boletos habían sido cancelados.
Ante esta situación el inmueble ubicado sobre Calzada de Tlalpan dio su postura al respecto, deslindándose de toda responsabilidad y asegurándole a los asistentes que el culpable de lo ocurrido era directamente Ticketmaster.
Este sábado, previo a la segunda fecha de Bad Bunny, Ticketmaster aseguró y se comprometió con el reembolso integro de los boletos cancelados, quienes tuvieron contacto directo e inmediato con la PROFECO para presionar a la boletera.
Bad Bunny tendrá su segunda y última fecha en nuestro país cuando se presente en "El Coloso de Santa Úrsula" este sábado 10 de diciembre.