DFP tag: DN_Intext_Center_BTF_1
El Gobierno de México impuso un arancel provisional a los clavos de acero en rollo para pistola provenientes de China, luego de que la empresa mexicana Deacero denunciara prácticas de comercio desleal por parte del país asiático.

La medida fue publicada el 5 de abril de 2025 en el Diario Oficial de la Federación (DOF), y establece una cuota compensatoria provisional de 0.380 dólares por kilogramo durante un periodo de cuatro meses.
La Secretaría de Economía (SE) inició una investigación en septiembre de 2024 para determinar si los productos chinos estaban ingresando al país con precios artificialmente bajos (dumping). El análisis arrojó que estas importaciones representaron más del 99% del total nacional y crecieron un 66% entre 2021 y 2024, generando daño a la industria nacional.
No es el primer arancel contra productos chinos
Esta nueva cuota se suma a la impuesta previamente, en agosto de 2024, a los clavos de acero para concreto también originarios de China, los cuales fueron gravados con un arancel definitivo del 31%. Aquella medida surgió tras otra investigación solicitada por Clavos Nacionales México y Clavos Nacionales, que concluyó en un margen de discriminación de precios del 86.73%, afectando gravemente a los productores nacionales.

La guerra arancelaria y su impacto en México
Estas decisiones se dan en el contexto de una guerra arancelaria global, intensificada desde el gobierno de Donald Trump, cuando Estados Unidos impuso fuertes aranceles a productos chinos como parte de su estrategia proteccionista. México, al ser un socio comercial clave de Estados Unidos y parte del T-MEC, ha tenido que alinear en ciertos casos sus medidas para proteger a su propia industria frente a las distorsiones provocadas por los productos de bajo costo procedentes de Asia.

Aunque México mantiene una relación comercial activa con China —es su segundo socio comercial a nivel mundial—, este tipo de decisiones puede generar tensiones. China ha criticado en el pasado las cuotas compensatorias impuestas por distintos países, y podría responder con medidas similares, afectando sectores como el automotriz, electrónico o de materias primas.