El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, pidió este jueves a Israel actuar con "respeto a los derechos humanos" para extraditar a Tomás Zerón, exdirector de la extinta Agencia de Investigación Criminal acusado de irregularidades en el caso de Ayotzinapa.
"No ha habido todavía respuesta y ojalá y el Gobierno de Israel actúe con respeto a los derechos humanos porque se está solicitando la extradición de este funcionario público, entre otras cosas, por hechos de tortura", manifestó el mandatario en su rueda de prensa matutina.
México anunció desde septiembre pasado la solicitud para extraditar desde Israel a Zerón, exfuncionario del sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018) acusado de ocultar pruebas y torturar testigos del caso de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa en septiembre de 2014.
Pero el proceso se ha complicado porque ambos países no tienen acuerdo de extradición y la semana pasada The New York Times publicó que Israel ha desatendido la petición por presunta represalia al reciente voto de México en la ONU a favor de investigar la crisis en Palestina.
"Que supuestamente lo están protegiendo en Israel y no quieren autorizar la extradición o el mecanismo para que sea extraditado porque México votó a favor de la paz y de que no se interviniera en Palestina y que, como represalia, ellos no van a enviar al señor Zerón", recordó López Obrador.
El mandatario ya había defendido el 3 de junio la postura de México en la sesión del Consejo de Derechos Humanos (CDH) el 27 de mayo, cuando la ONU aprobó una comisión internacional para indagar violaciones de derechos humanos en el conflicto bélico de mayo, que dejó más de 250 palestinos muertos.
Aunque el Gobierno de Israel criticó entonces a México, ahora el embajador de ese país, Zvi Tal, negó lo informado por The New York Times.
"(El canciller) Marcelo Ebrard envió una nota sobre esto al Gobierno de Israel y el embajador, tengo entendido, de Israel en México, aclaró que no era una postura oficial, de todas maneras (aquí está la nota)", indicó López Obrador al exhibir el artículo.
El próximo 26 de septiembre se cumplen siete años de la desaparición de los 43 estudiantes en el sureño estado de Guerrero. El Gobierno de Peña Nieto promovió la "verdad histórica" que señalaba que los estudiantes fueron detenidos por policías corruptos en Iguala y entregados al cártel Guerreros Unidos, que los mató e incineró en un basurero de Cocula.
Zerón se considera uno de los autores clave de dicha versión, cuestionada por familiares y por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que señaló que los cuerpos no pudieron ser quemados en ese lugar. López Obrador reconoció este jueves que resolver el caso es uno de los grandes pendientes que él tiene desde que asumió la presidencia, en diciembre de 2018.