Ignacio Suárez
El Fantasma ha recorrido el mundo del deporte a través de 6 Mundiales, 10 Copas América y 5 JO. Aportará a RÉCORD su conocimiento y exclusivas.
Inversiones sin trampas
En México para vender una franquicia de un equipo de futbol a un inversionista serio se tiene que hacer una cadena de oración, prender mil y un sirios pascuales, pedirle a un gobernador que debajo del agua les eche la mano con dinerito y apoyos a los empresarios interesados, que les harán el favor de comprar el equipo, más como botín político que como un proyecto deportivo.
En Inglaterra, es muy diferente. En una liga con triple ascenso y descenso que pone en riesgo las inversiones, en el momento que sale una franquicia a la venta ésta se vente como pan caliente. Para muestra la reciente compra del Chelsea por parte del empresario estadounidense, Todd Boehly, copropietario del equipo de beisbol de Los Angeles Dodgers y accionista en la NBA con los Lakers.
Con esta compra ahora hay más empresarios estadounidenses que británicos en la Premier League. Con esto, suman ya ocho los equipos que cuentan con un dueño o un accionista mayoritario del país de las barras y las estrellas que invierten en el 'soccer' contra solo seis inversionistas ingleses.
Lo que un día Roman Abramovich comenzó al comprar las acciones del Chelsea, se convirtió en una especie de epidemia empresarial, pues comenzaron a llegar capitales extranjeros a invertir en el futbol inglés. Llegaron de todos lados, de Italia, Emiratos Árabes Unidos, Egipto, China, Arabia Saudita y Tailandia.
La pregunta que muchos se hacían era ¿Por qué invertir en un equipo de la Premier League? La respuesta era simple: ser dueño de un equipo en esa liga, en ese país, significaba de inmediato obtener un reconocimiento mundial. De ser ilustres multimillonarios desconocidos para las grandes masas en el mundo, al comprar un equipo en la Premier, se convertían en unos ya reconocidos multimillonarios, junto con sus otras marcas y negocios. Porque es un negocio de venta mundial, no regional.
EL SECRETO
La Premier League es símbolo de riqueza y poderío, por principio de cuentas es la liga más valiosa del mundo. Diversas publicaciones afirman que ya hay más de 10 mil millones de euros invertidos en plantillas de los equipos: Manchester City es número uno en cuestión de clubes con mil 80 millones y eso que aún no se contabilizaba la llegada de Haaland, que se confirmó el día de ayer. Por tanto, no es de extrañar que la mayoría del top 10 de los jugadores más costosos del mundo milite en la Primera División Inglesa.
“La inversión extranjera le conviene tanto a los clubes como a los dueños, ya que estos últimos tienen un pie en la economía británica que sí es muy fuerte y para los clubes es más dinero. Tanto en Reino Unido como en España e Italia están buscando nuevos mercados en grandes partes de Asia, solo que la estructura legal y fiscal de los clubes españoles, por ejemplo, no permite que sea tan fácil meterse de forma directa, como sí lo es en Inglaterra”.
“El futbol se percibe cada vez más como un canal óptimo para diversificar carteras de propiedad, promover una marca al asociarse con patrocinadores y posicionarla para ganar nuevos mercados y clientes a nivel mundial. Además, Europa es vista como un mercado enorme y lucrativo, especialmente para las marcas establecidas en China o EU”, dice una investigación de inversores realizada por KPMG Football Benchmark.
Si bien no todos los equipos han alcanzado el éxito deportivo, sí en lo económico. En la Champions League de este año estuvieron los equipos de inversores extranjeros: el Liverpool, propiedad de los estadounidenses John W. Henry y Tom Werner; Manchester United, de la familia Glazer, también de EU; Chelsea, que era del ruso Abramovich; y Manchester City, de Sheikh Mansour, miembro de la familia real de Emiratos Árabes Unidos. Nada es casualidad.
Hace 19 años Abramovich compró al Chelsea en apenas 200 millones de euros. Hace unas semanas y casi dos décadas después lo vendió en ¡cinco mil millones de euros! Fue un negocio gigantesco, y no lo vendió porque quiso, lo obligaron a vender por sus relaciones con Vladimir Putin. La Liga Premier se comercializa en todo el mundo, lo mismo que la española y la italiana. En México solo en dos países.
EL PASADO, UN INFIERNO
¿Por qué antes NO invertían en La Premier League? La respuesta de los especialistas es cruda, cruel, real. El futbol inglés estaba secuestrado por los hooligans, por la inseguridad, por el poco respeto a sus lineamientos económicos y deportivos, por la corrupción de sus dirigentes que no cesaba, ni se castigaba.
Recordemos que el primer escándalo de corrupción en el futbol inglés comenzó en 1915, cuando Manchester United y Liverpool, eternos rivales, arreglaron un partido para que los llamados Diablos Rojos no descendieran. La victoria 2-0 fue confirmada como un amaño, que días antes del encuentro fue cuadrada por algunos jugadores en un bar. Ocho futbolistas fueron suspendidos de por vida, pero los equipos no recibieron castigo alguno.
Pasaron dos guerras mundiales, muchas décadas, un siglo y los escándalos sobre amaños, apuestas clandestinas y corrupción no cesaron en el futbol inglés. Una extraordinaria investigación encubierta del Telegraph, exhibió de manera brutal al que en ese momento era el técnico de la selección inglesa, Sam Allardyce, en el 2007.
CORRUPCIÓN Y PROMOTORES
El entrenador inglés, de 61 años, creía estar hablando con empresarios de Medio Oriente, pero en realidad eran periodistas encubiertos que lo grabaron clandestinamente, para comprobar su corrupción, y lo lograron plenamente. Tanto que tuvo que renunciar a su cargo. El diario inglés documentó amplios reportajes que desnudaron la corrupción y sobornos en el futbol.
Los colegas recibieron informaciones del modus operandi de algunos entrenadores, dirigentes y representantes, que recibieron o dieron dinero en efectivo para asegurar el fichaje de jugadores, y decidieron documentarlo en una investigación que duró muchos meses.
Este reportaje y la grabación a Allardyce, deja evidencia de cómo se operaba para pasar por encima de los reglamentos de la Federación Inglesa y sus impedimentos. En el video aparece junto a su representante, hablando a detalle de métodos para eludir la regla que prohíbe que los futbolistas pertenezcan a terceras partes (un promotor) y no a los clubes de futbol, sistema ahora vedado, conocido en inglés como TPO (third-party ownership), pero que sigue operando y existiendo, si no preguntemos al Toluca, lo que sucedió en la renovación de Alexis Canelo junto con Uriel Pérez y unas decenas de jugadores más.
Durante la entrevista con los empresarios ficticios, en aquel video incriminador, Sam Allardyce destaca que “no es para nada un problema” burlar esa regla y que él conocía representantes y agentes de jugadores que “lo hacen todo el tiempo”. Ese escándalo fue brutal, devastador, las reglas del futbol inglés se endurecieron brutalmente, se fiscalizaron al máximo. Ya no podía llegar cualquier jugador del extranjero, se pusieron mil y un candados.
CAMBIOS DRÁSTICOS
Por primera vez después de décadas, respetaron a rajatabla sus reglamentos. NO habría simulaciones, ni protecciones económicas para ningún club, habría piso parejo. Nunca se impidió el descenso, de hecho, se aumentó de dos a tres equipos igual que al ascenso, no importando si los que ascendieran tuvieran un estadio para cinco mil o para 40 mil. Se le dio prioridad absoluta a lo deportivo, para darle certeza y credibilidad a lo deportivo, y como consecuencia se convirtió en un mucho mejor negocio. Cuando lo lograron, llegaron las grandes inversiones, los pagos enormes de derechos de televisión.
Han pasado 15 años de aquel suceso y en México todo sucede exactamente a la inversa. Hay miembros de 'El Club de Toby', que en sus sueños guajiros quieren que el modelo funcione igual. No somos Inglaterra, ni Estados Unidos, no tenemos su economía, su PIB, su moneda, sus estructuras, y pretendemos compararnos con los posibles inversionistas de allá, con los que podemos encontrar acá, eso es una soberana estupidez. Tanto que sigue existiendo un exceso de multipropiedad.
Tampoco somos la NBA, la NFL, ni la MLS, donde no existe descenso. En el futbol el 97 por ciento de las ligas del mundo se desarrolla en el esquema del ascenso y descenso. En un mismo torneo con y sin Liguilla, se juegan dos torneos, los equipos que buscan el título y los que buscan evitar el descenso. Ese es el éxito desde siempre, lo sigue siendo ahora.
Así que no comparemos peras con manzanas, son esquemas de negocio muy diferentes. Cuando estemos en igualdad de condiciones socio económicas y políticas, aquello podría funcionar, en el futuro inmediato en este futbol nuestro de cada día, sus oscuros manejos y sus gobiernos es imposible, una utopía.
FUTBOL, COMO REFLEJO DEL PAÍS
Kevin Baitup, un reconocido economista londinense, fue citado en una excelente publicación del periodista Fredi Figueroa, en el diario 'El Economista', por ello hemos reproducido aquí varios extractos de este valioso texto, ya que en ellos se explica el porqué de las enormes inversiones en el futbol inglés. “El futbol siempre es un reflejo de lo que sucede en un país. Inglaterra, aún con el Brexit, tiene que hacer un papel fuerte, y las empresas multinacionales, los dueños y los millonarios de otros países no se van a quedar aislados; por ello, una economía emergente como Rusia y lo mismo China, entre otras economías asiáticas muy fuertes, le llegaron al precio a los dueños de clubes británicos”.
Si es cierta esa afirmación de que el futbol es el reflejo de lo que sucede en un país, pues eso lo explicaría todo: la podredumbre de nuestra liga, su falta de seriedad para seguir sus propios reglamentos, su invención de castigos, aboliciones a modo, es lo que hemos vivido por décadas y no parece que en futuro inmediato cambie mucho. El manejo de nuestro futbol es un asco y lo mismo podemos decir de lo que es y ha sido la vida política del país, gobierne quien gobierne. Han cambiado los nombres, los colores, no las mañas, es una historia sin fin.
Por esta compleja problemática de no respetar sus propios reglamentos, el afán de proteger a los poderosos, joder a los enemigos, bloquearlos, darles limosnas para evitar revueltas, es que no llegan a nuestro futbol inversores importantes, serios, poderosos, y cómo decía 'Don Teofilito', ni llegarán, por lo menos no pronto, ni en cantidad.
INVERSORES DECEPCIONADOS
A la división de ascenso (cuando hubo) llegó capital español para conformar el Atlético de San Luis. ¿Por qué? Porque había un negocio potencial, una franquicia cuando hubo ascenso se operaba con menos de los 50 millones de pesos que recibía Orlegi del Gobierno de Tamaulipas, según documento el portal elefanteblanco.mx recientemente.
El costo de la franquicia no superaba los dos millones de dólares, si se ascendía automáticamente su costo subía de manera exponencial, pues superaba con facilidad los 20 o 25 millones de dólares ya estando en la Primera División. Entonces sí, la inversión valía la pena. Hoy, sin ascenso, en la franquicia de Liga de Expansión apenas ganas un trofeo y si bien te va, cinco millones de pesos (apenas 250 mil dólares) que no alcanza ni para un mes de sueldos. ¿Dónde está el negocio? ¿Cómo invertir o para que invertir?
Cuando ascendió San Luis, ya supo de qué se trataba, el equipo ni era negocio, ni un semillero de exportaciones, ya no les gustó la forma de operar de Doña Fede y buscaron venderlo a toda costa, no hubo compradores serios que se comprometieran a dejarlo en la ciudad, pero creo que en cuanto aparezca alguno venderán al equipo.
¿Qué hicieron entonces en San Luis? Desde Madrid redujeron los costos y apostaron por dos directivos capaces que logran hacer mucho con poco presupuesto: Severiano García y Rodrigo Incera, y la muestra es que ya no pagaron multa y están en la Liguilla. Algo similar, ya habían construido en el Puebla.
Al Necaxa, llegaron accionistas famosos con una inversión modesta, que no se ha notado en los refuerzos. Su mejor 'inversión' ha sido tuitear apoyo desde sus redes sociales donde tienen millones de seguidores, pero eso en la cancha sirve de muy poco.
Bravos de Juárez, es un desastre. Una ciudad que por su ubicación tiene un potencial de patrocinios binacionales (USA-Mex) está en un hoyo. Adeudando el 50 por ciento del pago de la franquicia, sin un estadio propio, sin canchas para que las categorías inferiores y equipo femenil entrenen dignamente, con jugadores que se niegan a firmar contrato por la fama de inseguridad de la ciudad. No es casualidad que hayan pagado multas en años consecutivos. Es un desastre.
Querétaro vive una incertidumbre total, castigado, sin poder tener ingresos de esquilmos, taquilla, con los derechos de TV ya comprometidos, y que además empezará el siguiente torneo con una desventaja enorme y último lugar del porcentaje, está en el limbo: ¿Se queda? ¿Se muda? ¿Se vende? ¿Quién se avienta ese trompo a la uña?
La ciudad es maravillosa, con un potencial industrial y económico muy importante, estratégicamente localizada en el centro del país, donde tienes comunicación cercana con la mayoría de los equipos, que te permite ahorrar mucho dinero en logística y viajes. Sin embargo, a pesar de todas las ventajas parece tener una maldición y no encuentra inversores serios. El Gobernador Kuri les ha rogado a muchos que le entren, pero los fuertes le dijeron que no.
A QUE LE TIRAS CUANDO SUEÑAS…
¿Quieren seguir soñando que podemos tener los mismos inversionistas que la MLS? ¿Qué podemos tener los mismos ingresos de derechos de TV que la Premier League? Soñar es bueno, se vale, pero para poder soñar hay que despertar primero, trabajar y construirlos sin pisotear a nadie. No somos Inglaterra, no somos Estados Unidos, somos México con enormes problemáticas, pero también enormes fortalezas. Denle credibilidad a su producto, respeten sus propias reglas. ¿Quieren alcanzar la cima? Perfecto. Todos lo queremos. Hay que tomar una pastilla de 'ubicatex' y comenzar escalón por escalón, la vida y la credibilidad se construye con hechos, no con dichos.
“Tú eres aquello que haces, no lo que dices qué harás”, Carl Gustav Jung.