El peor enemigo del Rey de los Deportes se hizo presente por primera vez en el estadio Alfredo Harp Helú en lo que va de la temporada. La lluvia cobró protagonismo en un duelo sumamente cerrado entre Diablos Rojos y Guerreros que terminó con victoria 4-3 a favor de los escarlatas.
La lluvia que arrasó en el oriente de la capital del país durante la tarde no impidió que ambos conjuntos saltaran al diamante en punto de la siete de la noche para el Playball.
Durante seis entradas el juego transcurrió con total normalidad y de pronto el agua se hizo presente sobre el terreno de juego. A partir del séptimo inning la lluvia, aunque ligera cayó de manera tupida sobre el césped artificial del Infierno de la Ciudad de México.
Con tres carreras por bando al momento de caer la lluvia, los umpires tuvieron que esperar a que uno de los dos equipos decidiera desempatar la pizarra. Fueron los 'Pingos' quienes tuvieron que imponer condiciones con una extraña jugada en la novena baja que sentenció el encuentro.
Con batazo de Ricardo Valenzuela que no apuntaba para nada, Omar Meza — quien entró de bateador emergente por Jorge Cantú — corrió desde primera y tras el error de Samar Leyva tirando a primera, el mexicano aprovechó para irse hasta la registradora ante el júbilo de todos los presentes en la casa de los Diablos.
El equipo capitalino consiguió así su tercer serie ganada en lo que va de la campaña y la primera en casa. Los capitalinos siguen teniendo de hijos a los Guerreros con cinco triunfos en sus encuentros en el 2021.