Jahir Ocampo aumentará el grado de dificultad en sus clavados rumbo a Tokio 2020, donde se sacará la espinita de Río 2016.
Sin importar que tendrá 30 años de edad, el saltarín se visualiza en sus segundos Juegos Olímpicos. Por eso incorporará a su lista de competencia las dos y media vueltas al frente con tres giros.
“Otra vez vamos a entrenar desde cero, pensar en lo que me hace falta, en corregir esos detalles y aumentar el grado de dificultad a como dé lugar”, mencionó Ocampo en entrevista con RÉCORD, tras la inauguración de una tienda de su patrocinador Under Armour en Vallejo.
Ocampo, quien debutó en la máxima justa deportiva con el quinto lugar en el trampolín de 3 metros sincronizados junto a Rommel Pacheco, tiene como objetivo participar en 2017 en los Grand Prix, la Serie Mundial y los Campeonatos Mundiales de Natación FINA de Budapest, Hungría.
“Sé lo que me hace falta, sé que tengo que aumentar el grado de dificultad en la prueba individual. Ma Jin (su entrenadora) sigue de vacaciones, entonces ya empecé a entrenar”, reconoció.
Además, Jahir aseguró que se quedó con ganas de tener una mejor actuación en Río.
“Pasó muy rápido mi competencia, llegué a una Final directa y cuando menos me di cuenta ya había acabado. Pensé que lo iba a manejar de mejor manera.
“No me quise meter tanto en la competencia para no ponerme nervioso y eso fue lo que me pasó, que estaba distraído, luego el tema de las luces (que se prendieron en el último clavado)”, explicó.
Después de ganar Bronce en los campeonatos Mundiales de Barcelona 2013, Oro en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 y Bronce en la Copa del Mundo de Río 2016 en el trampolín de 3 metros, junto a Rommel, Jahir está ávido del éxito en la prueba individual.