La larga ausencia de Tony Romo parece haber llegado a su fin y, al menos de que ocurra algo distinto, el veterano de 13 campañas regresará a la titularidad de los Vaqueros de Dallas en el duelo que sostengan ante los Delfines de Miami.
El quarterback se ha recuperado de una lesión en la clavícula izquierda y podría estar jugando por primera vez desde el 20 de septiembre; con ello, los Vaqueros esperan poner fin a una racha de siete derrotas consecutivas.
Dallas ha promediado 14.2 puntos en los últimos cinco partidos, segunda peor cifra en la NFL en ese lapso, y no han conseguido anotaciones de seis puntos en tres ocasiones, incluyendo el último juego ante Tampa Bay.
Ni Brandon Weeden ni Matt Cassel han sido la respuesta en la posición de quarterback. Dallas todavía tiene la esperanza de clasificar a Playoffs aunque ya no hay margen de error.
“Si se ve bien en los entrenamientos va a jugar. Estamos entusiasmados de que así sea”, indicó el entrenador Jason Garrett.
Romo tiene dos juegos como abridor ante los Delfines con igual número de victorias, 412 yardas por pase, cuatro envíos de anotación y dos intercepciones. Además de esto, los Vaqueros han ganado cuatro de los últimos cinco encuentros en la serie.
“Se han perdido bastantes juegos, pero en todos ellos los jugadores dieron el cien por ciento. Es emocionante saber si podemos darle vuelta a la situación”, dijo Romo este miércoles.
Su regreso podría servir de impulso para su compañero y receptor Dez Bryant, que tiene por lo menos una recepción de anotación en 12 partidos consecutivos frente a oponentes de la Americana y quien dejó escapar una recepción en el duelo ante Bucaneros que hubiese representado la victoria.
Los Delfines de Miami, por su parte, siguen luchando por llegar a zona de comodines.
