Sin que aún esté confirmado, Peyton Manning podría retirarse con al menos una intercepción en cada Super Bowl que jugó
La primera vez que llegó a el gran juego del emparrillado fue en la edición 41 con los Potros de Indianapolis, enfrentado a los Osos de Chicago. Aquel 4 de febrero pese a errar algún envío, se llevó el MVP y consiguió su primer y único anillo.
En febrero de 2010, Manning volvió al Super Bowl, en aquella ocasión se enfrentó a los Santos de Nueva Orleans en un partido flojo que perdió Indianapolis por 31-17 y en el que sufrió una intercepción muy costosa, de 74 yardas y que constó un touchdown.
El Super Bowl XLVIII sería muy probablemente el más doloroso para Peyton Manning, pues además de ser interceptado en al menos un par de ocasiones los Broncos de Denver fueron aplastados 43-8 por los Halcones Marinos de Seattle.
En esta última versión del Súper Tazón, no se salvó de ver cómo un ovoide enviado desde sus manos llegaba a un rival, cuando Kony Ealy atrapó el lance y luego hizo un valioso acarreo para las panteras.