Los Bravos de León siguen de malas en la primera serie de la temporada en el Estadio Domingo Santana, luego de que este miércoles se desplomara una estructura en el jardin central del inmueble.
Tras cuatro entradas de acción en el cotejo contra los Diablos Rojos del México, un fuerte viento provocó el incidente y detuvo el partido.
El desplome tuvo como lesionados a dos camarógrafos, el receptor de bullpen de los Diablos, Salvador Navarrete y el coach del bullpen escarlata, Braulio Neri, quien sufrió una rotura de ligamento.
Unos minutos después de la caída de la estructura, personal de Protección Civil clausuró una parte de las gradas del estadio y la zona de transmisión.
"Estamos cerrando zonas como medida de precaución. Revisaremos nuevamente todas las estructuras": declaró Salomón Ocampo, director de Protección Civil.
Dos horas y media después, la estructura fue removida y se reanudó el partido, mismo en el que los Bravos de León lograron salir airosos, luego de vencer 8-0 a los ‘Pingos’ y así arrancaron la temporada con una victoria en casa, tras 25 años de estar fuera de la Liga Mexicana de Beisbol.
En el segundo duelo de la doble cartelera, los Diablos fueron quienes se llevaron la victoria por marcador de 4-1, aprovechando la gran salida que tuvo el lanzador Arturo López, quien estuvo sobre la lomita por espacio de 5.2 entradas, aceptando dos hits y una sola carrera, además de otorgar una sola base por bola.
Este jueves se disputará el tercer y definitivo duelo de la serie en León, en el que Daniel Flores es el lanzador probable de los Diablos, mientras que Fredy Quintero suena para el montículo de los Bravos.
Cabe mencionar que el encuentro de esta tarde se debió efectuar en la noche de este martes, sin embargo, problemas en el alumbrado del recinto obligaron a la reprogramación del duelo.
Tras el acontecimiento, Iván Terrazas, pelotero de los Diablos, recriminó a Mauricio Martínez, presidente de Bravos, pues el dirigente había criticado a los capitalinos por apoyar la suspensión del juego del martes.
