Ryan Lochte no recibirá castigos adicionales por parte del Comité Olímpico Internacional, tras haber mentido al afirmar que fue víctima de un asalto a mano armada durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
El COI consideró "adecuado" que el Comité Olímpico de Estados Unidos (USOC por sus siglas en inglés) haya suspendido al nadador por 10 meses y le haya retirado los 100.000 dólares en bonos que obtuvo por su medalla de oro en la justa veraniega, además, Lochte se perderá el campeonato mundial de natación de 2017.
Además, el panel del organismo internacional también aceptó las suspensiones de cuatro meses impuestas a Gunnar Bentz, Jack Conger y Jimmy Feigen, compañeros del nadador. Los cuatro quedan separados de la delegación estadounidense, que visitará la Casa Blanca.
Lochte y sus compañeros, estuvieron involucrados en una noche de copas, una madrugada en una gasolinera en Brasil durante los Juegos de Río, antes de afirmar que fueron amenazados con armas de fuego y asaltados.
El USOC y la federación estadounidense de natación anunciaron las sanciones el pasado jueves. Ryan Lochte no recibirá el financiamiento mensual de ninguna de estas organizaciones, no puede entrar a los centros de entrenamiento del USOC y debe cumplir con 20 horas de servicio comunitario.
Pero todo eso palidece en comparación con lo que Lochte perdió el mes pasado cuando varios patrocinadores importantes, incluidos Speedo y Ralph Lauren, abandonaron al atleta de 32 años tras sus acciones en la gasolinera.