Holanda se ha convertido en el primer país del mundo en usar una medida totalmente natural para poder librarse de la amenaza de los drones, el entrenamiento de águilas.
Estas majestuosas aves serán una de las 'armas' principales de la policía de los Países Bajos para derribar algún artefacto que sobrevuele su espacio aéreo de manera sospechosa, evitando el uso de municiones y de redes, que ya están siendo utilizadas en otras naciones para deshacerse de aereonaves no tripuladas.
En conjunto con una compañía llamada 'Guard From Above', autoridades holandesas estarían llevando a cabo este proceso de entrenamiento, con el motivo de fortalecer a los animales para evitar que sean lastimados por las hélices de un dron.
"Las garras de las águilas son increíblemente filosas y su agarre es lo suficientemente fuerte como para romper un hueso, pero eso no quiere decir que no puedan ser lastimadas, pues las hélices de un dron girando a gran velocidad pueden cortar fácilmente el tejido animal", declaró un entrenador de aves en Holanda.