Aún para Facebook, uno de los emporios cibernéticos más importantes de la actualidad, algunos detalles pueden salirse de control ante la crisis, justo así ocurrió a costa de una inocente ciudadana estadounidense.
Isis Anchalee, ciudadana de San Francisco, fue víctima de las extremas medidas que la red social ha emprendido ante el apogeo de ataques terroristas alrededor de todo el mundo; el único 'pecado' de la chica fue llamarse Isis, como el grupo radical del Estado Islámico.
"Facebook piensa que soy una terrorista. Aparentemente enviarles una captura de pantalla de mi pasaporte no es suficiente para volver a abrir mi cuenta", publicó la indignada joven al respecto.