Sepp Kuss no podía ocultar la sonrisa de oreja a oreja al acelerar hacia la meta para convertirse en el primer estadounidense que gana una etapa del Tour de Francia en 10 años. Justo antes de llevarse la victoria en el extenuante recorrido del domingo, Kuss aventó sus lentes de sol hacia el público y alzó los brazos para luego cubrirse el rostro.
Tyler Farrar había sido el último estadounidense en salir airoso en una etapa de la competencia ciclista más importante del mundo en 2011.
“Es algo increíble, no tengo palabras", dijo Kuss. “Para ser honesto, había sufrido bastante en este Tour de Francia. No sentía que tenía fuerzas en las piernas. Hoy sabía que iba a terminar donde vivo, así que salí motivado", añadió.
El corredor de 26 años, oriundo de Colorado, esperó hasta el final para lanzar su ataque en el duro trayecto de 191 kilómetros entre Ceret, a las faldas de los Pirineos, hasta la meta en Andorra.
Kuss atacó en la subida al Col de Beixalis, un ascenso de mil 796 metros, y mantuvo la distancia frente al veterano español Alejandro Valverde, quien entró 23 segundos detrás. El holandés Wout Poels quedó tercero y se apoderó de la casa de puntos rojos al mejor escalador.