En la calzada de Los Héroes de León, Guanajuato, los enamorados sellan su romance con un candado perpetrado en el Puente del Amor. Ahí bien podría estar un cerrojo para representar el romance entre Sébastien Ogier y el Rally México.
El francés de Toyota Gazoo Racing ha ganado cinco de las últimas siete ediciones del Rally Guanajuato y tan pronto comenzó la versión 17 de esta competencia del Campeonato Mundial de Rally (WRC), se puso al frente del pelotón en un idilio digno de literatura shakespeareana.
De coronarse en El Bajío, Ogier igualaría los seis triunfos en territorio mexicano de su compatriota Sebastien Loeb. Por lo pronto, luego de dos días de competencia, el nacido en Gap, Francia, es líder del Rally México con un tiempo de una hora 23 minutos 09.2 segundos, con 13.2 segundos de ventaja sobre su más cercano perseguidor, Teemo Suninen.
El actual campeón de WRC, Ott Tanak, quedó en el cuarto sitio detrás de Elfy Evans a 33.4 segundos del líder galo.
Desde temprano en El Chocolate, Ogier demostró que la terracería guanajuatense es capaz de hacer una simbiosis genunia con sus neumáticos. Literalmente, Seb hizo morder el polvo a sus rivales durante las 12 etapas realizadas el viernes en El Bajío.
Incluso en la callejera en el centro de León, Guanajuato, Ogier mostró su poderío para cerrar un día gloria, que hizo recordar sus momentos más emblemáticos de este tórrido romance que vive con Guanajuato.
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